Poesías
Poesía de una madre dedicada a su hijo Luis, con parálisis cerebral
Sólo tú y yo
Eres entraña de mis entrañas
Regalo de mis entrañas
Regalo merecido
Del infinito cielo.
Quiero tu ternura para siempre
Quiero tu ternura para siempre
En el silencioso contestar
De tu sonrisa.
Manos rosadas, ojos de estrella,
te llevaré a dónde tú quieras:
Por el mundo iremos
Tocando el verde húmedo
De los pastos
O el plumaje suave de los pájaros
O correremos como locos
Detrás de ensueños.
Beberemos cara al cielo,
La lluvia refrescante.
Iremos por senderos misteriosos
Escuchando el susurro de los duendes.
Abriremos puertas
De castillos encantados,
Lloraremos de plenitud por la vida.
Todo esto y más:
Gritaré tu nombre
Y el eco de tu voz gritará el mío.
Mi voz será tu voz,
Mis ojos serán tus ojos y mis huellas serán tus huellas
Por dónde tú transitarás como un príncipe.
Tus delicados pies se deslizarán por la alfombra
Que yo tejí desde siempre
Para ti!
Seremos una oración que sube al infinito.
Tendremos nuestra historia,
Tendremos nuestras alas,
Para adueñarnos del tiempo y del espacio
Sólo tú y yo
¡Hijo mío!